Fecha de publicación: 14 de marzo de 2019
Sinopsis
Una pareja, Miranda y Ryan, luchan por salvar su matrimonio,
lo suyo fue un flechazo, ambos sintieron que el otro era su pareja para toda la
vida sin embargo han llegado a un punto en el que todos los días discuten por algo.
Para intentar salir de esta crisis deciden ir a terapia de pareja y es allí
donde el doctor que les trata les sugiere irse un fin de semana a una cabaña en
Hidden Springs, sin móviles, para volverse a reencontrar. Deciden llegar cada
uno por separado pero cuando llega Ryan sólo ve el coche de Miranda, dos copas
de vino en la mesita de la sala y sangre en el cuarto de baño. ¿Dónde está Miranda?
Impresiones
Yo no había leído nada de este autor y eso que ha tenido gran
éxito con los dos libros anteriores: El día que se perdió la locura y El día
que se perdió el amor. Tras leer las críticas de su tercer libro me dije, pues
vamos a por él. Aunque por lo visto se trata de un libro completamente
diferente a los dos anteriores, un thriller más centrado en los personajes y
más pausado en acción. Un gran avance para el escritor.
Es una historia contada por sus distintos protagonistas,
Ryan, Miranda y otros personajes van narrando los hechos que abarcan desde
1975, la época universitaria de James Black con su sueño de hacer la mejor
película del mundo; los comienzos de la relación entre Ryan y Miranda, en la
misma universidad unos años después, ambos estudiando para ser guionistas de
cine, y, por último, un tercer plano que se desarrolla en la actualidad, el fin
de semana de la desaparición de Miranda. Cada capítulo es contado por uno de
los personajes y poco a poco se van consiguiendo datos para ir desentrañando el
misterio (o los misterios).
“Uno nunca se da cuenta de los momentos trascendentales
mientras suceden”
Javier Castillo nos lleva a los Estados Unidos, a Hollywood,
a la meca del cine, los protagonistas son directores de cine, guionistas,
actores… El cine es un aspecto importante en la historia pero no es el único
aspecto, destaca también la complejidad de las relaciones.
Es una historia donde los malos no son tan villanos porque
tienen unos límites y los buenos dejan ver su lado malo, que puede ser malísimo…
¿Dónde está el límite? En realidad no somos tan diferentes… ¿Vale todo por
conseguir el éxito? ¿Hasta dónde llegarías por ser feliz?
Por ahí he leído en alguna reseña que el libro es predecible,
tengo que decir que no comparto para nada esta opinión. Sí que hay algo en la
historia que es predecible, pero se trata de la historia que hay dentro de la
historia, en concreto, la que narra los hechos de la vida de James Black, el mentor y también amigo de Ryan, pero para nada
puedes pensar que el final es el que es. Más bien es un ¿cómo? ¿Y aquí se
queda? O como dice el propio autor:
“Fundido de pantalla en blanco”
Que según he logrado saber significa lo
siguiente: “Cuando acaba una película y la pantalla se funde en negro, queda
claro que esto marca el fin de la historia. Sin embargo, cuando un director
decide invertir la norma y acabar su película con un fundido en blanco, lo que
viene a continuación es un completo enigma.”
En fin, es un libro con el que seguro que pasarás un buen
rato y me gustaría destacar algo que dice en propio Javier Castillo en los
agradecimientos:
“GRACIAS, por perderos una vez más en una historia de un
pequeño escritor que solo intenta robaros un suspiro”
Me encanta. Sólo por esto, Javier, te tendré en cuenta para
continuar leyendo historias tuyas.